SE RETIRA DALTON MCGUINTY

 María Páez Victor

Comentario Político

Noticiero Panorama

Radio Voces Latinas

Toronto, 16 octubre 2012

Ayer tarde la Provincia quedó estupefacta cuando el Primer Ministro de Ontario, Dalton McGuinty anunció que se retiraba de su cargo después de ejercerlo durante 9 años.  

Dalton McGuinty ha sido un político de mucho éxito en este contexto canadiense en el cual vivimos. Cuando lo eligieron líder del Partido Liberal de Ontario, hace 16 años, tuvo que enfrentarse al gobierno de extrema derecha de Mike Harris. Muchos lo subestimaron pero se equivocaron pues  procedió a ganar 3 elecciones provinciales para el Partido Liberal.

Trabajé como consejera política  para McGuinty cuando era Líder de la Oposición , y un día que conversabamos amenamente me dijo: “yo quiero ser recordado como el primer ministro que ayudó a los niños de  Ontario.” Creo que  ha cumplido su deseo.  McGuinty, es un esposo y padre ejemplar,su familia es el eje de su universo.  Y su mandato se ha distinguido por la atención que le ha dado al sistema educativo al cual proporcionó mejores salarios a los maestros, clases más pequeñas, más educación pre-escolar y la más alta inversión desde los años 1960.

Pero no contempló planes de reforma amplia al sistema en sí, y lamentablemente, no estableció un verdadero plan provincial  de guarderías que  es tan necesario. Como buen liberal, sus medidaas fueron siempre “termino medio”. Economicamente abrazó la privatización y projectos junto al sector privado no  siempre tuvieron  éxito viendo los fracasos que fueron los archivos electrónicos médicos y la ambulancia aérea Orange. Abandonó planes para construir dos plantas de energía  de gas por lo cual la Oposición acusa al ministro de energia de mentir sobre el costo de esa cancelación. Pero esos asuntos no resuenan en el público tanto como la educación.

Su gestión no consistió en grandes razgos, de profunda visión, de largo alcance sino de medidas de poco a poco, pragmáticas, lo cual refleja su carácter personal. McGuinty no es hombre extrovertido, que articula grandes ideas, no tiene una personalidad carismática ni tiene el don de orador.  Por eso lo subestimaron y no vieron la fortaleza de carácter que ocultaba, pues lo que sí sabía era ir de campaña electoral de pueblito en pueblito, y hablar pausadamente con la gente de tú a tú de las cosas pequeñas que les preocupaban.

Para los latinos, acostumbrados a otra cultura política y otro estilo más populistas, la figura de McGuinty puede parecernos sosa, sin sabor. Sin embargo, esa solidez , tranquilidad, pragmatcismo es algo que a los canadienses les atrae. El lema de Canadá: “Peace, Order and Good Government” (Paz, orden y buen gobierno) es emblemático para conocer el carácter canadiense.  Como bien lo sabe uno de los primeros ministros de mayor éxito, el conservador Bill Davis quien gobernó a Ontario durante 14 años con un estilo político muy parecido al de McGuinty.

Que McGuinty se  retire  después de 9 años se comprende por el desgaste personal que significa esa posición política, y muchos consideran que es buena hora que entre otro líder. Pero la gran interrogante es: por qué al mismo tiempo ha decidido McGuinty suspender la Legislatura? Esto es una medida muy controversial – medida que el Primer Ministro de Canadá Stephen Harper ha convertido en un “canadismo” al haber suspendido el Parlamento Federal 3 veces cuando le convenía políticamente hacerlo. Ahora, un primer ministro de provincia ha seguido  su mal ejemplo. Si lo hace el Primer Ministro Federal, entonces lo pueden hacer los primeros  ministros provinciales. Esto es un mal augurio y un golpe para la democracia en este país.

Lo cierto es que McGuinty se encuentra  dirigiendo  un gobierno minoritario,  y perdió al NDP, muy mal perdidas, las elecciones para puesto parlamentario en Kitchener Waterloo hace unos meses.  La provincia tiene un défecit de $14 billones  - lo cual dentro de la ideología neo-liberal es muy indeseable- y para contrarestarlo McGuinty quiere congelar  salarios en el sector público, para lo cual tiene que negociar con los varios sindicatos del sector público. Sabe que en la Legislatura no tendría apoyo ni de los Conservadores ni del NDP, así que, si anuncia su retiro, y la Legislatura continúa sus labores, lo más seguro es que la Oposición eche abajo a su gobierno en el primer voto que pueda. Tendría entonces que haber elecciones pero el Partido Liberal estaría sin líder.

En otras palabras, McGuinty ha cerrado la Legislatura para darle tiempo a su propio partido a escoger un líder antes que se venga abajo el gobierno minoritario, y encima, podrá mientras tanto,  negociar con los sindicatos sin tener que rendirle cuentas al Legislatura  ni darle oportunidad a la Oposición a meterse en el asunto. Fue una doble jugada  muy conveniente  desde el punto de vista partidista,  pero desde el punto de vista de la democracia, nefasta.

McGuinty recientemente le quitó el derecho a huelga a los maestros para forzarlos a aceptar las negociaciones salariales. Esto fué como tirarle una bomba a su base electoral, pues los maestros reconocían a McGuinty como el “Primer Ministro de la educación”. Hoy tiene a casi todos los maestros en su contra, no por asunto de salario, sino por haberles quitado su derecho a huelga. Esta es otra razón por la cual no podía asegurarse que podría ganar otras elecciones.

Qué pasará ahora? Los sindicatos tendrán  que negociar con el gobierno de McGuinty. Se levanta el espectro de que en las próximas elecciones puedan ganar los conservadores en Ontario, de ser así, regresaríamos a los terribles años de Mike Harris, lo cual sería desastrozo para la clase trabjadora. Hay también la posibilidad de que ganase el NDP, en tal caso la situación sería al contrario.

Pero lo cierto es que los Liberales no pueden estar seguros de que puedan formar el próximo gobierno – sea mayoritario o minoritario-  así que tendrán que escoger muy, pero muy bien, el próximo líder liberal de Ontario.

Se corre el rumor que McGuinty podrá  lanzarse a las elecciones para  líder del Partido Liberal Federal, para competir con a la candidatura de Justin Trudeau.  Sería la contienda entre un jóven carismático con poca experiencia contra un político de gran experiencia y éxito pero poco carisma. Interesante escogencia que se le presentaría a los liberales!

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