LOS LIBERALES
Comentario Político
Noticiero Panorama
Radio Voces Latinas
28 enero 2013
El sábado en la convención
del Partido Liberal de Ontario eligiron su nuevo líder para reemplazar a Dalton
McGuinty. A la vez eligieron al Primier Ministro de la provincia. Como se sabe,
en Canadá no se elige directamente a los primeros ministros; sean, federal o provincial, el primer
ministro es el líder del partido que tenga mayoría en la legislatura.
Eligieron a una mujer,
Katheleen Wynn, que además es lesbiana. Esa fue la noticia principal que la
prensa se esmeró en recalcar: lo
histórico de este hecho, todos diciendo que no era de importancia su género o
su orientación sexual. Si es cierto que es la primera mujer ministro para
Ontario, pero han habido 7 primeras ministros mujeres en las provincias, y una
mujer ministro Federal. Ciertamente, es la primera lesbiana.
Katheleen Wynn se ha
distinguido por su educación y habilidad, por ser una de las mejores ministros
de McGuinty. Su estilo es de razonamiento y negociación, sin gestos dramáticos,
y en el ejercicio de sus diversos puestos, ha sido muy eficiente. Tiene en
verdad, un estilo muy parecido a McGuinty.
En este sistema político
donde diferencias ideológicas son mínimas, todo gira en torno a la persona, no
a los valores o políticas. Y cuando se habla de políticas, se refieren siempre
a medidas imediatas, de actualidad no a largo plazo.
Si se reconoció que su rival,
Sandra Puppatelo tiende hacia el sector empresarial, y Katheleen Wynn es mas
identificada con servicios públicos. Pero en la convención, hubo poco de lo que
llaman en inglés “the big picture” o sea, la vision amplia de cuál es el futuro
de esta provincia o Canadá. Eso fue aludido con frases rhetóricas y vacías. Y
se debe recordar que Ontario siempre ha sido crucial en la definción del
destino de Canadá.
Mientras tanto, afuera del
recinto donde se reunían los liberales, 20,000 empleados públicos, entre ellos
los maestros, marcharon indignados por los abusos a sus derechos laborales.
De vez en cuando, las camaras
enfocaban en esta enorme manifestación, pero adentro, los liberales actuaban
como si “aqui no pasa nada”. Aquellos que si hablaron del problema con los
maestros, simplemente decían que iban a “negociar” y establecer paz con los
maestros. Pero sustancialmente, nada.
Me dió lastima. Tanto
provincialmente como federalmente, el Partido Liberal en Canadá tiene una
historia importante, y da pena ver
cuánto ha caído. Con candidatos mediocres que buscan protagonizar, con pocas excepciones, ofrecían poco en
cuanto a los grandes desafios de la era moderna que vivimos;
·
Cómo remediar la
economía canadiense que va rumbo a ser de exclusiva extracción de recursos
no-renovables?
·
Qué proponen para
resolver la ansiedad y las miserables condiciones de los pueblos indígenas
aqui?
·
Dicen que van a crear
empleos, y uno se pregunta cómo? Si le dan rienda libre a las empresas a
expensas de trabajadores?
·
Qué dicen del cambio
climático que ya ha derretido los hielos del Arctico abriendo la zona al
transporte marítimo y extracción petrolera, destrozando el ecosistema de miles
de especies?
·
Qué dicen del sistema de
salud que día a día cae víctima de las empresas privadas de servicios, de
seguros y las farmaceúticas?
·
Y van a continuar
apoyando el envío de la fuerzas armadas canadienses a pelear las guerras de
conquista de los estadosunidenses?
·
Y la democracia? Los
Liberales se indignaron cuando Harper clausuró dos veces el Parlamento en
Ottawa por pura conveniencia de su propio partido, pero McGuinty no dudó en hacer
exactamente lo mismo en Ontario. La candidata Puppatelo, sin ningún rubor, dijo
que de ganar, no abriría la legislatura hasta que ella no ganara un puesto
parlamentario. Creo que esa postura ayudó a su derrota.
En su discurso al ganar la
elección, Kathleen Wynn dijo repetidas ves que “ vamos a continuar esta
renovación” – me pregunto cual
renovación es ésa? Dijo “vamos a construir encima del legado de Dalton”. O sea, más de lo mismo.
El país necesita un sentido
de sí mismo, una narración que le dé sentido a los cambios, y los retos que
enfrenta.
Cuando gobernaba Pierre
Elliot Trudeau, él dió visión y
dirección muy clara a esta nación:
·
El político filósofo
creía en “la sociedad justa” y promulgó el sistema de bienestar social;
·
Reconoció que Canadá no
tenía solamente una cultura franco-inglesa, sino multicultural, y le dió un
puesto honroso a la cultura de imigrantes que contribuyeron a edificar esta
nación y que siguen haciéndolo.
·
Conocía el papel central
de las artes, y las respaldó con museos, subsidios, apoyo.
·
Promulgó el
bilingualismo, el conocimiento del idioma francés en todas las provincias, para
asi hacerle justicia al pueblo de Quebec.
·
Nos enriqueció a cada
uno de nosotros con la Carta de Derechos (Charter of Rights) que para siempre consagró
los derechos humanos en Canadá.
·
Liberó la Constitución
de Canadá de los lazos
colonialistas con el parlamento
británico que tenía que aprobar asuntos canadiense.
·
Y en medio de la feroz
“guerra fría” entre los EEUU y la Union Soviética, Trudeau se negó a romper
lazos con Cuba o la China, manteniendo una política exterior bastante soberana.
Tanto que cuando murió, Fidel Castro vino a su entierro – hecho histórico.
Se puede criticar a Trudeau
en varios puntos, pero no se le neiga que tuvo una vision clara para este país.
Y fué un amigo de América
Latina. Su gobierno no conspiraba con partidos de oposición desestabilizando
países latinos, como ahora.
En cambio, vemos que fué el
Liberal Bob Rae quien propuso el tratado de libre comercio con Colombia, a
pesar que es el país con los peores abusos a derechos humanos y de mayor peligro para sindicalistas.
Y esta semana el
parlamentario liberal de Scarborough en Toronto, Jim Karygiannis, ha iniciado
una petición al gobierno de Harper para discutir en el parlamento a Venezulea.
Habla de darle apoyo a la “diaspora” venezolana aquí que desea una “verdadera”
democracia en Venezuela donde el pueblo está sufirendo bajo el gobierno de Hugo
Chávez y dice que en ese país hay un vacío de poder.
La ignorancia de este señor
es abysmal – ha caído en manos de
los que apoyaron el golpe de estado del 2002,y que secuestraron al presidente. Esta es una campaña sucia de
la oposición venezolana para crear zozobra internacionalmente, pues dentro del
país se saben derrotados.
Pierre Trudeau, sabemos de
cierto que estaría de parte no de élites corruptas, sino de parte de los
pueblos de Nuestra América.
Lástima que los liberales han
perdido su brújula moral y visión política.
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